Expertos en la aplicación económica de la Ley 35/2015, de 22 de Septiembre, de reforma del sistema para la valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación (NUEVO BAREMO), para la valoración de indemnizaciones en casos de accidentes de circulación a partir de 1 de enero de 2016.

Las tablas de cuantías de lucro cesante recogidas en el texto del baremo, tanto en el supuesto de fallecimiento como de incapacidad permanente, pueden diferir de la valoración actuarial, aplicando las bases técnicas del propio Baremo en función de los datos reales del accidentado. Nuestra experiencia, en estos inicios del nuevo Baremo, aconseja calcular las cuantías por lucro cesante, en los casos que puedan acreditarse las pensiones públicas que se perciben, ya que pueden existir diferencias entre el lucro cesante real respecto al de las tablas de la Ley.

Para la valoración de indemnizaciones utilizando el anterior Baremo en los casos ocurridos antes de 1 de enero de 2016, (accidentes de circulación, malas praxis médica y accidentes laborales por falta de medidas de seguridad), aplicamos técnicamente la doctrina jurisprudencial sobre el lucro cesante y daño emergente no compensado a partir de la sentencia del Tribunal Supremo, Sala Civil de fecha 25/03/2010, y en los accidentes laborales, la Sentencia del Tribunal Supremo de 23/06/2014 de unificación de doctrina, en las que se determina el lucro cesante, como beneficios contingentes (no expectativas de ingresos) por diferencia entre el coste/capital de los ingresos que hubiese percibido el accidentado hasta su prevista jubilación y el coste/capital de las prestaciones que pasará a percibir, añadiendo las ya percibidas.